La
gente
de Val Badia recuerda aún con cariño y afecto el compatriota
Francësch Wilhelm de Brach, denominado "El Gran Bracun". El héroe
de Marebbe se hizo grande honor y fama en las crociadas en Tierra Santa,
pero los ladinos lo recuerdan por la valorosa lucha contra el ferozísimo
dragón que muchos años atrás vivía en los pies
de el Sasso della Croce. El dragón, se abalanzaba encima de cualquier
animal que encontraba para devorarselo, y los lugares que él visitaba,
comenzaron a ser abandonados por la gente rapidamente y el fantomático
bestio, no encontranda más nada para nutrirse, comenzó a
bajar hasta el valle, asaltando la ciudadanía. Cada cierto tiempo,
algún valeroso intentaba aventurarse hasta el Sasso della Croce
con la intensión de combatir al monstruo, pero no alcanzaba siquiera
a levantar su espada que era tragado de un sólo mordizco por el
dragón.
Fue
entonces
que un día en que "El Gran Bracun" en persona, decidió afrontar
al dragón. La noticia atravezó todos los países, más
veloz que el viento y la gente se abalanzó sobre las calles para
implorarle ayuda. Brach se puso su reluciente armadura, subió su
dorsel, y se recó derechito hacia el escondite del monstruo. La
enorme bestia salió fuera de su cueva, pero el guerrero, para nada
intimidado, ni menos con miedo, agarró su flecha, extendió
el arco, y lo golpeó precisamente en el corazón. El monstruo
cayó al suelo con gritos pavorosos; luego del acertado golpe, todo
se cayó, y la valle comenzó a florecer nuevamente.
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